En un contexto nacional marcado por la pérdida de empleos formales, Colima logró destacar al registrar un incremento del 2.8% en su número de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), posicionándose entre las entidades con mejor desempeño en generación de empleo formal durante mayo de 2025.
De acuerdo con el más reciente informe del IMSS, mientras que 19 estados del país reportaron una reducción en sus plantillas laborales —entre ellos Oaxaca, San Luis Potosí y Tlaxcala que se sumaron a esta tendencia negativa—, Colima se colocó junto a Hidalgo, Estado de México y Aguascalientes como uno de los pocos estados con crecimiento en el empleo formal.
En contraste con este panorama positivo, a nivel nacional el número de empleos formales disminuyó en 45 mil 624 puestos durante mayo, lo que representa una baja de 0.2% respecto al mes anterior. Además, el acumulado de empleos creados en los primeros cinco meses del año es el más bajo desde que se tiene registro, con apenas 113 mil 665 nuevas plazas.
El informe del IMSS atribuye la caída general del empleo, principalmente, a factores estacionales del sector agropecuario y a un desplome en la industria de la construcción, que presentó una contracción anual del 7.1%. También hubo caídas en la industria extractiva (-5%), el sector agropecuario (-1.5%) y la transformación (-1%).
A pesar del panorama desfavorable en varios sectores y regiones, Colima y otras entidades como Nuevo León, Michoacán, Chiapas y Jalisco lograron mantener una tendencia positiva, lo que sugiere una mayor resiliencia local en la generación de empleos y posiblemente una mejor diversificación económica.
Por otro lado, el reporte también destaca que el 87.2% de los trabajadores afiliados al IMSS cuentan con una plaza permanente, el porcentaje más alto en los últimos 16 años. Además, el salario base de cotización promedio alcanzó los 629.9 pesos diarios, el mayor en la historia del instituto, lo que representa un aumento nominal anual de 7.6%.
Mientras tanto, el registro de patrones continúa a la baja, con una caída anual del 2.8%, lo que podría ser indicativo de una menor formalización de nuevas empresas o del cierre de micro y pequeñas unidades económicas.
En suma, Colima se consolida como una de las pocas excepciones en un contexto nacional adverso, mostrando señales de estabilidad laboral y fortalecimiento de su economía formal.
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